______________________________________________________________________________________
Al comprar una moto de segunda nos exponemos a una serie de situaciones, a veces problemáticas, que podrían afectar nuestro disfrute de la nueva adquisición. A manera de opinión muy personal, mi consejo para los más nuevos es pensarlo bien para probar suerte con una moto de segunda. Si el presupuesto es corto y de ahí surge la decisión de no comprar nuevo, si no se sabe mucho de motos o no se recibe buena asesoría, fácilmente se puede terminar con un adorno caro, lleno de polvo y sin dinero para arreglarlo. He estado allí y es muy frustrante. Aunque no hay recetas infalibles, es posible mejorar bastante nuestras probabilidades si tan solo aplicamos los siguientes consejos.
Vaya con una persona de confianza y mayor conocimiento de motos: De preferencia debemos ir acompañados por un mécanico de confianza o, al menos, un amigo con mayor experiencia en motos. Si no sabemos mucho y vamos solos un vendedor “colmilludo” nos puede querer meter gato por liebre.
Compruebe que los documentos estén en regla: teniendo el número de placa de la moto o el nombre del dueño registral, es posible meterse la página del Registro Nacional para corroborar si la moto tiene infracciones, gravámenes o problemas relacionados. Les comparto el enlace: http://www.registronacional.go.cr/bienes_muebles/muebles_consultavehiculos.htm
Chequee número de motor, de serie, de chasis y VIN: Esto nos va a evitar terminar con una moto de dudosa procedencia, una “gemeleada” o con los números del marco borrados. Con los papeles de la moto en mano y con algo de meticulosidad debería ser fácil comprobar los datos versus los del vehículo.
Pregunte la razón de venta: Si bien es cierto que no siempre vamos a recibir una respuesta honesta, a veces no es tan difícil sacar conclusiones al comparar los argumentos del vendedor con sus reacciones. A ratos es fácil darse cuenta de que el vendedor es honesto y su razón de vender la moto es transparente.
Revise golpes, raspones, fugas, frenos y demás: Toda moto es propensa a caerse, así que vale la pena inspeccionar manillas de freno y embrague, los puños, el tanque y costados. Las marcas directamente en el motor rara vez son buen indicio. Uno que otro golpe no es gran cosa, pero detalles como fugas de aceite, refrigerante o líquido de frenos sí son de cuidado. Si la moto tiene caballete, hay que comprobar que las llantas giren alineadas con sus ejes. Es bueno también ver estado de las llantas y vida útil de frenos. Duden de una moto sospechosamente muuuy limpia y “maquillada” para lograr la venta.
Solicite al vendedor que la moto esté en frío: se debe insistir bastante en esto, ya que una moto con fallas las va a mostrar más en frío. La moto no debe estar caliente ni tibia cuando llegamos a verla. Debemos revisar si la moto mantiene bien el “mínimo” y si la terminal de la mufla está humedecida de aceite o nos mancha la mano al ponerla cerca de los gases de escape.
Regatee: siempre es posible “jugar” un poco con los precios para ir midiendo el interés del vendedor en cerrar la venta y si puede ser flexible en nuestro beneficio. El que no llora…no consigue mejor precio de venta!
Finalmente, les deseo la mejor compra y que los consejos les den una mejor idea de lo que es importante considerar antes de cerrar el trato. Con un poco de suerte, ojos bien abiertos y la asesoría de un buen mecánico o motociclista experimentado podemos ir inclinando las probabilidades de una buena compra a nuestro favor.
R.
Interesad@ en sacar licencia? Consejos para escoger su primera moto? Cómo ir dando los primeros pasos? En el blog hay mucho más de lo que se ve en la primera página, así que l@s invito a ver las otras páginas en "Entradas antiguas" al puro pie de cada página y a seguir el blog. Me pueden contactar al 8814-9694.